miércoles, septiembre 20, 2006

Eh! !Que yo bajo aquí!



Si algún día ves un grillo cantar, una mariposa volar, un barco navegar , un zeppelin vigilar, y un koala saludar, es que entras en la grandeza de los pirados. Ellos, los únicos en ser felices, los únicos en no saber qué pie calzan. Confuncio con ellos sería Confundido. Boris Karloff reviviría como la Cenicienta. La vida en términos sencillos, simples y deslamados, sería BELLA, por más que te opusieras, por más que no quisieras. Así, Sín más. Lisa y llanamente... quien pudiera decirlo cada día, eh? El mundo de los pirados es ignorante, es simple, no tiene alicientes más que saltar de flor en flor y parar a descansar cuando apetece. La lluvia es un receso del sol, y es tan admirada como éste. No hay desdichas, sólo gajes del oficio. Todo es una benedicción, todo es una gracia divina. No se sabe quién es ese dios, pero está. Es el que dá. La secta no tiene cabecilla, no hay grados, y los seguidores silban y cantan con sus globitos de colores y suaves pétalos revoloteando por este mundo. Los pirados claman la buena fe, la revolución social del polvo, el amor libre de los saltamontes, la anarquía de las nubes, la autosuficiencia de los esparragos. Las causas perdidas, sin salida son el afan de lucha, el motivo por el que respirar. Los sin destino lanzan miradas sin ver horizonte, los sin hora intuyen el tiempo por el suave olor del amanecer. Los pirados se piran sin razón, aparecen sin querer, giran por intuición.
Siempre hay uno a tu alrededor, si lo buscas no lo encuentras pero si te distraes aparece y como mosca cojonera, no deja que le abandones hatsa que le prometas fidelidad. Te quieren absorber y te juran compañia insaciable. Son aduladores y saben venderte sus ideas. Tu las compras y caes, como ser humano débil que eres.
No te dejes perder la compañía de uno de estos pirados, los hay a borbotones y crecen entre botones. Son únicos. A mi lado va uno de ellos y es extraordinario, cuando el salto hasta la próxima margarita es corto, me coge y me acerca él. Cantamos Bruce y soñamos despiertos. Es fantástico. No tiene una negativa nunca.
Y ahora nos vamos de viaje al Pireo. Queréis venir? El mundo ahora cae muy lejos, creo que me bajé en la anterior parada, al menos yo apreté el stop. ¡Claro que fué el que me indicó con su mano y yo le dije -Eh! que yo me bajo aquí.!
Repito, ¿te vienes?. Te espero con un zumo de felicidad en la mano como coctail de bienvenida. No tardes....

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La suave e ingeniosa ironia se merece un comentario, mejor de lo que yo pueda servir, pero amiga... es lo que hay.
has escrito una deliciosa oda a la sencillez.Has tenido la delicadeza de no aclarar si la sencillez era otada o impuesta. Genial.da a pensar y lo más importante: lees el párrafo con la mueca de placer en la cara. He disfrutado. Te enimo a seguir con la misma agudeza y cariño, que has descrito en un muy pequñito trocito de mundo. Te quedad infinidad de porciones más por describir, no mejor dibujar! Quedo a la espera de más momentos de placer lector. En cuanto a las posibles secuelas que pueda dejar "la mueca de placer continuo", no te preocupes. Las señales de placer son siempre bien recibidas.

Laiern dijo...

Gràcies pels teus comentaris. Saps que m'agrada dibuixar i dius que ho faci més sovint, oi? Bé doncs aviat t'avanço que en faré més. Només serà possar-me i començar a volar. I intentaré fer-te volar una altra volta, que és que que intentava en aquest post. Si tot fos tan fàcil, oi? Però intentarem posar avituallaments en el camí per com a mínim arribar a temps per l'esmorzar de l'arribada. Que te'n sembla? D'acord, m'hi esforçaré, aviam si arribo a bon nivell. Gràcies Tarresmont.